Fotografía de Cecilia Fernández
Se dice que un buen actor es también albañil. En la mayoría de las obras en nuestro medio, un elenco, además de actuar, también monta y desmonta escenografía, cuelga luminarias y promociona la temporada. Fer es uno de esos constructores.
Lo conocí hace ocho años cuando junto con Cristian Mercado y Luigi Antezana buscábamos un director confiable para dirigirnos en una comedia sobre la amistad y un cuadro “blanco”.
Aunque en ese entonces Fer estaba de paso, aceptó ser parte del proyecto y con orgullo digo que esa obra no sólo marcó el retorno de Fernando Arze Echalar a su país, sino que también fue el comienzo de varias colaboraciones juntos. Actuamos en una obra y en una película, pero el proyecto más intenso que vivimos fue la coescritura de la serie La entrega y el largometraje Muralla, junto con Camila Urioste.
Durante casi dos años guionizamos una historia coral en la cual Fer encarnó después a uno de los personajes centrales: Coco Muralla Rivera, un minibusero alcohólico que, por pagar la cirugía de su hijo enfermo, se vio envuelto en un caso de trata y tráfico.
Pocas veces vemos casos en los que un actor participa en la escritura del guión y viceversa. El proceso fue sorprendente. Cuando Fer empezó el rodaje, ya conocía a Muralla perfectamente y dejó que éste se apoderase de su creador.
Lo bueno de trabajar con Fernando es que es más que un albañil. También es arquitecto e ingeniero… y aún le quedan muchos personajes e historias por construir.
Fernando Arze es actor boliviano de cine y teatro.